Nuevamente es viernes 13 y como es costumbre, salen los programas de televisión develando los misterios de este fatídico día, nos recuerdan las misteriosas historias (como aquella de la captura de los templarios en 1307) en relación a la maldición del viernes 13 y otras tantas curiosidades.
Es imposible evitar traer a la mente esas pésimas películas de Jason: Viernes 13. Éstas son sinceramente terribles, un sujeto con mascara de hockey (al mas puro estilo del equipo de los patos) anda deambulando y matando personas sin más. Varios años y películas después y luego de un trabajo en conjunto con el loco de la calle Elm, por fin se acabó, pero no está muerto, nunca lo está.
Así, vuelve el viernes 13 al mundo real (como lo hace cada año) y como lo hará por los siglos de los siglos. Amén. Para recordarnos que las personas están paranoicas, y lo increiblemente fácil que es volverlas víctimas de sugestión, porque creyentes o no, no pueden evitar ver este día como si fuera uno diferente, uno fuera de lo común.
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